Construido en un área de mil 660 m2, donde había antes dos viejos inmuebles, se yergue Fiorhé Apartamentos, un atractivo edificio de 11 pisos, ubicado en el exclusivo barrio El Chicó de la localidad de Chapinero, en Bogotá.
El diseño enamora a la vista; dotado de una fachada estética y elegante –y claro, de la comodidad, personalidad y funcionalidad de sus departamentos, Fiorhé tiene todo para convertirse en una de las “máximas estrellas del barrio”, en uno de los inmuebles simbólicos de la localidad.
Conjuntar todos los elementos que logren esta magia por supuesto que no fue tarea fácil, y uno de ellos es la participación de uno de los más grandes expertos en estos menesteres: la firma mexicana Sordo Madaleno, que se encargó de todo el diseño arquitectónico, logrando un proyecto de innovación residencial.
La oficina azteca de prestigiados arquitectos forma parte de una tríada, junto con las firmas colombianas Nicolás Manrique Construcción y Octubre, que le ha dado vida a Fiorhé Apartamentos.
Este proyecto adquiere estatus de icónico para Sordo Madaleno Arquitectos (SMA), pues se trata de su primer trabajo en Colombia y en toda Sudamérica. Fundado en 1937 por el reconocido arquitecto mexicano Juan Sordo Madaleno (1916-1985), el despacho adquirió fama al desarrollar un estilo que ya lo identifica claramente como el precursor de la “Arquitectura Moderna Mexicana” en todo el mundo.
BÚSQUEDA DE NUEVOS RETOS
“La firma se define a sí misma como una reinvención constante tanto en arquitectura y diseño como en aspiraciones y búsquedas de nuevos retos. Con cada proyecto, afirma y comprueba que es versátil, y que el único elemento que une a todos los proyectos es la pasión por la calidad y la excelencia en el diseño arquitectónico”, explica SMA en cuanto a su filosofía de trabajo.
“Cuando un proyecto llega a la firma, se analiza minuciosamente para potencializar su valor social, ético, de diseño y de programa, ampliando así sus oportunidades más allá de los requisitos iniciales”, añade.
Su historia en la Ciudad de México ha dejado huella. Ya a mediados del siglo pasado, los trabajos de Sordo Madaleno comenzaron a ser reconocidos en el ámbito internacional, destacando sus cualidades para crear proyectos con un entendimiento inusual de las relaciones espaciales, y una particular sensibilidad por el color y los materiales.
Diseños con mano segura, producción de edificios armoniosos y ajustados a su sitio, con un especial y exquisito aire de elegancia, y muy bien proyectados tanto en la distribución como en el detalle, son premisas que siguen siendo el eje de los proyectos de la firma.
En Fiorhé Apartamentos, su primer trabajo en Sudamérica, la propuesta de Sordo Madaleno “se caracteriza por el énfasis en la estructura vertical, haciendo las divisiones horizontales entre los 32 pisos que conforman el edificio, algo casi imperceptible, esto genera una sensación de amplitud y claridad, donde la relación entre el edificio y el entorno es totalmente armónica”, detalla el proyecto en su portal.
“Además, la modulación y repetición de los balcones le brinda ritmo y dinamismo a la fachada, y son el lugar ideal para la vegetación interior, que aporta sutiles pinceladas de color verde a la composición”, añade el comunicado.
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